Actúa consciente y no olvides que en internet interactúas con personas como tú, que sienten, que tienen sueños, miedos, virtudes, complejos y simplemente una forma distinta de ver la vida como resultado de su contexto social, dada por su educación, cultura, creencias e incluso la bioquímica de sus emociones.
Nuestras realidades son absolutamente distintas, incluso en nuestro hogar papá, mamá, hermanos, hermanas, esposo, esposa, hijos e hijas piensan, sienten y actúan distinto de nosotros, aun viviendo en el mismo contexto y habiendo sido educados, en muchos de los casos, bajo los mismos supuestos; pero, ¿Por qué hago énfasis en esto?, simplemente porque es la base fundamental para comprender la diversidad de nuestro entorno físico o virtual.
Hablando del entorno virtual, la diversidad es aún mayor, nuestras conexiones son más amplias y no tienen fronteras, es la magia del internet y las telecomunicaciones, justamente esto es lo que de repente lo vuelve más complejo al momento de convivir en nuestras comunidades virtuales.
Analicemos lo siguiente, el uso principal que damos a nuestras redes sociales es esencialmente para comunicarnos, pero ¿hemos entendimos de qué se trata el concepto de comunicación?, quizá aún no y ahora mismo vamos a esclarecerlo para comprenderlo mejor. La comunicación es un proceso a través del cual compartimos información para expresar opiniones, pensamientos, emociones, sentimientos y necesidades de carácter personal o colectivo, su objetivo principal es lograr la el entendimiento y la comprensión entre las partes involucradas para establecer relaciones o construir acuerdos. En sí, la comunicación es un puente que nos conecta con el mundo y puede darse a través de distintos medios o formas de lenguaje según el contexto en el que se desarrolla, pero sobre todo según los actores involucrados.
Entonces, la civilidad digital, tiene como base la comunicación como una acción consciente para intercambiar información de forma asertiva, con empatía y respeto por todos aquellos que forman parte del entorno virtual. Parece algo complejo de lograr, justo por lo que mencionábamos con anterioridad, la diversidad; sin embargo, el respeto parece ser algo de carácter universal y aunado a la educación, son armas poderosísimas para lograr armonía en nuestros entornos virtuales, aunado a esto y parafraseando un poco los cuatro principios que Microsoft promueve en su Desafío para la Civilidad Digital te queremos compartir lo que para nosotros son las prácticas más esenciales para promover la civilidad en internet:
1. Navega consciente, conoce tu entorno virtual, ten claridad del tipo de red social o plataforma digital en la que te conectas y la clase de usuarios con los que interactúas, conoce las reglas de la comunidad y respétalas. Todo esto te permitirá conocer en dónde estás parado y definir de mejor forma cómo comunicarte con quienes participan en los diferentes entornos virtuales, por ejemplo, no es lo mismo tu comunidad de LinkedIn que tu comunidad de TikTok, entonces para canal de comunicación existe una forma correcta de comunicarnos de forma asertiva y efectiva.
2. Mantente informado, estar al tanto de lo que acontece y validar las fuentes de información para comprender mejor cuál es el ánimo de cada comunidad virtual y en torno a qué giran las opiniones de quienes participan en ella, te ayudará a comprender mejor los temas que ocupan o trascienden dentro de las mismas para forjar tu opinión personal que contribuya al debate fomentando el diálogo y principalmente el respeto por la libertad de opinión.
3. Entrena tu habilidades de comunicación, ninguno tiene la verdad absoluta, ni tú, ni yo, ni nadie, todo parece ser relativo, entonces esto es una pauta para entrenar nuestra capacidad de tolerancia, elemental para lograr relaciones sanas y comunicación objetiva. En internet debes aprender que incluso la edad resulta un factor esencial para determinar la intención de un mensaje, es decir, nuestra capacidad de comunicarnos depende de muchos factores y por ello debemos siempre procurar ser neutrales y universales, no estoy intentando limitar tu libertad de opinión, pero sí intento que comprendas que a veces el mensaje que envías podría ser interpretado de un modo diferente y no precisamente por variantes gramaticales, sino hasta por el ánimo de quien te lee. Entonces, por ello, es esencial que entrenes tus habilidades de comunicación para que siempre realices un ejercicio asertivo de la misma.
4. Promueve el respeto y sé un ejemplo de ello, no permitas que ningún usuario altere la armonía de las comunidades virtuales, denuncia los comentarios o contenidos irrespetuosos o violentos, que promueven el odio, la discriminación racial, sexual, étnica, religiosa o de género, por citar ejemplos, o que incitan a las autolesiones y ponen en riesgo el bienestar de las personas. Utiliza los recursos disponibles en cada plataforma para denunciar usuarios, contenidos o comentarios que infrinjan las normas comunitarias.
5. Analiza lo que compartes, sé consciente del contenido que publicas o los comentarios que emites en tus entornos virtuales, recuerda jamás compartir algo que pueda causar daño a otra persona o comunidad, cuida tus palabras y evita que tu juicio se nuble ante algún desacuerdo, sé siempre amable aun cuando alguien no este completamente de acuerdo con lo que opines, pero no permitas que nadie te falte al respeto, ante situaciones incómodas, respira profundo y actúa siempre con cautela, prudencia, empatía y decoro.
Por último, no olvides la regla de oro de Microsoft, actuando con empatía, compasión y amabilidad en cada interacción, tratando a todos con los que te conectas en línea con dignidad y respeto.
Si quieres aprender más sobre la civilidad digital, te invitamos a tomar este breve curso que hemos preparado para ti.